El buen aprovechamiento de la comida es vital en los tiempos que corren. Esto no es solo para ahorrar dinero, y tiempo en hacer la compra, que también es importante. Pero el verdadero motivo de esto es que, debemos ser conscientes de lo que compramos, y hacer un consumo sostenible y responsable. Y esto podemos lograrlo de varias formas, una de ellas es aprovechando al máximo los alimentos que compramos. A pesar de esto, es inevitable, sobre todo para las personas que viven solas, que la fruta o la verdura se ponga mala o demasiado madura de vez en cuando. Y te vamos a dar algunas herramientas para poder aprovecharla en los últimos momentos. Te contamos nuestras mejores ideas fáciles para aprovechar algunas frutas y verduras muy maduras.
En primer lugar, queremos decirte que, aunque vamos a poner ejemplos con frutas y verduras concretas, al final todos se basan en ciertos métodos de conserva. Por ejemplo, al hacer una salsa, cocinando los ingredientes con aceite y sal estamos conservándolos. Al meter los ingredientes en un tarro de conservas, con aceite y vinagre, los estamos utilizando también como conservantes. Al hacer mermelada o batidos que lleven azúcar, estamos haciendo prácticamente lo mismo.
En el pasado, cuando no existían los congeladores industriales y los ultra procesados, se utilizaban estos métodos para conservar los alimentos. La sal, el azúcar, las especias, el adobo, las preparaciones concretas… para que los alimentos no perdieran todas sus propiedades y no provocaran ningún mal tras su consumo. Sabiendo esto, puedes estar en calma, pues no va a pasarte nada por consumir algo de fruta o verdura un poco más madura de lo normal.
Cuando los tomates se quedan demasiado blandos para estar crujientes en la ensalada, es el momento de hacer con ellos un buen sofrito y utilizarlo como salsa para acompañar cualquier plato. Es muy sencillo y podremos añadir las verduras que más nos gusten, para darle a la salsa nuestro toque maestro. Simplemente hay que sofreír las verduras a fuego medio en la sartén, hasta que estén doradas, y después, si nos gusta una salsa suave, pasar el contenido por una batidora.
Esta salsa puede conservarse durante días en el frigorífico, pero puede durar hasta 6 meses en el congelador, así ya no puede ir ni un tomate a la basura. ¡A cocinar se ha dicho!
Una muy buena opción de utilizar los plátanos cuando empiezan a estar más oscuros de lo que nos gustaría, es utilizarlos en verano para hacer helado de plátano. Aunque no lo parezca, es una elaboración muy sencilla, y no importa lo maduros que estén los plátanos, siempre y cuando se puedan comer.
Para hacer helado de plátano basta con que los congeles, y después los pongas en una licuadora o batidora con otros ingredientes dulces que te gusten. El plátano es el que da la textura al helado, y queda como un helado normal. Puedes añadirle o no azúcar, y cualquier otro ingrediente como frutas, cacao, leche… es increíble lo bien que queda.
Con esta receta apuntada, cuando llegue la época de fresas, comprarás cajas y cajas sin miedo a tener que tirar nada. Simplemente con las fresas que estén más maduras hay que hacer los siguiente: trocearlas y ponerlas en un cazo a fuego alto con dos cucharadas de azúcar por cada 100g de fresas aproximadamente, junto con dos ramitas de canela. Se le puede echar algunas rodajas de naranja y pimienta rosa rosa para que dé un toque especial. Una vez pasen los primeros 5 minutos a fuego alto, se baja el fuego y se deja cocer otros 10 minutos. Se tritura con una batidora, se mete en botes y se hierven al baño maría boca abajo para que se envasen al vacío. Esta mermelada aguanta semanas en buen estado, sin necesidad de estar en frío.
Después de leer todas estas ideas para aprovechar algunas frutas y verduras muy maduras, nos queda poco por aportar. Un último apunte simplemente: sabiendo dónde compra y haciendo un consumo de calidad, las elaboraciones que hagamos estarán buenas sean como sean. En Freshdor nos gusta hacer apología de los productos bio como hablamos en este artículo, y en consecuencia de un consumo responsable y lo más sostenible posible.
Porque estamos comprometidos con lo que hacemos, lo que vendemos, y por supuesto, lo que tú consumes.