Épocas como la primavera merece platos tan ricos y frescos como una buena ensalada de frutas. No solo para paliar las subidas de temperaturas, sino también para mantenerte activo y darte ese chute de energía que necesitas para tu día a día. Por eso, te invitamos a elaborar y probar estas recetas de ensalada con fruta.
Mezcla los sabores italianos con un toque de frescura a mayores. Es un plato muy simple de elaborar. Tan simple como trocear una porción de sandía y queso feta o mozzarella en cubos. A esto le puedes añadir un toque de menta y frutos secos como piñones, si te dan ganas de hacer una obra de arte con este plato. Por otra parte, y al contrario que otros tipos de ensalada caprese, aquí no se utilizaría el aceite.
¿Alguna vez has probado el jamón con melón? Pues en esta receta los dos son protagonistas. En cuanto al jamón serrano, este puede ir en taquitos (que venden en muchos supermercados) o directamente en lochas. Nosotros preferimos hacer tiras medianas y pequeñas, pero si lo que quieres es que el propio jamón se enrede en los trozos de melón, ¡puedes hacerlo! Al fin y al cabo esto es cuestión de gustos personales. Además, si quieres darle el doble de frescura, te invitamos a que lo pruebes con un poco de lechuga romana fresca.
Una de las recetas de ensalada con fruta más atípicas son las que contienen pescado. Pero, más allá de lo que uno pueda opinar en un primer momento, saber elegir el pescado adecuado hace que puedas combinarlo con lo que te apetezca. Por ejemplo, en este plato el salmón le da un sabor muy fino a la ensalada y consigue mezclarse de maravilla con el melón y la textura aceitosa del aguacate.
Al igual que en la ensalada de jamón con melón, el salmón puedes cortarlo en trozos o directamente comprar lonchas de salmón ahumado o al fresco. Además, si nos ponemos creativos, incluso puedes dar un toque cremoso a la receta con algo de yogurt griego o queso.
Volvemos a confirmar que la cremosidad que proporciona el queso a estas ensaladas es más que necesaria. Las fresas (troceadas o enteras) da a la receta un toque dulce y ácido, mientras que la rúcula consigue refrescar con un toque picante el paladar y el queso parmesano suavizar toda la experiencia. Suena delicioso, ¿verdad? Pues es hora de que lo compruebes desde la comodidad de tu casa.
Un toque tropical a una ensalada puede ser perfecto. La combinación es estupenda si te gusta o quieres darle una oportunidad al sabor de la papaya. Además, el palmito sirve muy bien como guarnición y su textura y sabor se llevan muy bien con los de la papaya. Luego, por supuesto, está el queso feta, fresco y muy cremoso.
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