Deliciosas y fáciles de incluir en el día a día, ¡Así son las moras! Te invitamos a descubrir los beneficios de las moras para la salud y te adelantamos que, aunque tienen un tamaño pequeño, cuentan con excelentes propiedades para cuidarte.
Las moras son fáciles de incluir en la dieta. Puedes añadirlas en tus cereales o copos de avena, hacer deliciosos smoothies y helados e incluso, hacer salsas para acompañar platos salados. ¡Son muy versátiles! Las moras son una excelente apuesta no solo por su exquisito sabor sino porque cuentan con grandes propiedades antioxidantes y antiinflamatorias.
Estas pequeñas frutas silvestres se caracterizan por su color violeta oscuro y también se les conoce como zarzamoras o frambuesas negras. Son frutos carnosos y jugosos que tienen sabor ácido y un aspecto de racimo. Son muy valiosas por su valor nutricional y es aquí donde encontramos algunos de los beneficios de las moras: tienen vitaminas C y E, son antioxidantes, cuentan con antocianina (flavonoides) y un largo etcétera.
Uno de los beneficios de las moras es que, gracias a las antocianinas, que cuentan con propiedades antioxidantes y antiinflamatorias, estas frutas son unas grandes aliadas para cuidar la salud del corazón. ¡Incluyendo a las células más pequeñas! Estos frutos silvestres ayudan al corazón y, en general, a todo el sistema cardiovascular.
Sorpresivamente, las moras también contribuyen a reducir el riesgo de padecer derrames cerebrales. ¿Por qué? Porque las moras contienen resveratrol, un poderoso antioxidante que actúa para prevenir daños en el sistema vascular. Por lo tanto, el consumo de moras contribuye a reducir el riesgo de sufrir accidentes cerebrovasculares.
Todas las frutas contienen fibra en menor o mayor medida y las moras no son la excepción. Además de contener fibra, que contribuye a regular el tránsito intestinal, estas frutas silvestres son ricas en vitaminas K, B6, niacina y riboflavina. Estos nutrientes contribuyen a mejorar los procesos digestivos. Y es que las propiedades de las moras favorecen la descomposición de esos alimentos que son muy difíciles de digerir (proteínas, carbohidratos y grasas).
Las moras son bayas silvestres y tienen un alto contenido en vitamina C y otros antioxidantes. Estos compuestos son vitales cuando se trata de fortalecer las defensas del organismo, es decir, el sistema inmunitario. Consumir moras es una buena opción para evitar y prevenir enfermedades e infecciones respiratorias como la gripe, los resfriados y el asma.
Por su aporte de vitaminas C y E, así como las antocianinas, las moras son grandes aliadas para detener el daño oxidativo ocasionado por los radicales libres, responsables del envejecimiento. Pero no solo hablamos de cuidar tu cuerpo por dentro, ¡Las moras también previenen en el envejecimiento prematuro de la piel!
En consonancia con el apartado anterior en lo que a antioxidantes se refiere, las moras se encuentran en el catálogo de alimentos que contribuyen a reducir el riesgo de padecer cáncer. Es decir, podrían tener un efecto anticancerígeno. Existe una teoría que afirma que el resveratrol, las antocianinas y las vitaminas A, C y E, tienen un efecto positivo en la inhibición de algunos tipos de células malignas.
Tener una buena visión depende de diversos factores y hábitos, pero se sabe que el consumo habitual de moras puede proteger tu visión de diferentes enfermedades. ¿Por qué? Porque las moras son ricas en zeaxantina. La zeaxantina es un carotenoide que contribuye a mantener la salud de la retina, evitando, a la vez, que los rayos UV causen daño.
Gracias a su aporte de minerales alcalinos, las moras contribuyen a regular el pH de la sangre y favorecen a la remineralización del cuerpo. ¿Necesitas más motivos? Además del aporte de minerales, estas pequeñas frutas silvestres tienen un efecto diurético, esto significa que son de gran ayuda cuando se trata de combatir la retención de líquidos de forma natural.
Debido a su efecto antiinflamatorio y antioxidante, las moras se recomiendan a las personas que padecen artritis. Se cree que estas pequeñas frutas pueden mejorar y aliviar algunos síntomas asociados a esta enfermedad. Por otra parte, existe una teoría que sostiene que las moras mitigan el daño sufrido en las articulaciones.